Cuando quieran una reedición mierda, está es la indicada. La “masterización” está hecha con las patas (y tomada de un acetato muy madreado por lo que se puede apreciar), viene la portada original por ahí escondida, y coronando la porquería resulta que el cd es u mugriento cd-r, o sea, grabable. El colmo del insulto llega cuando el estúpido póser que sacó esta mierda (un tal Don of the Dead), dice que es un súper disco al que te rinde pleitesía… ajá, pero que no le quiso invertir más que para sacarlo en cd grabable. Qué se vaya al diablo. Lo rescatable es el booklet que tiene algunas fotos y entrevista. De ahí en fuera gasten sus 10-12 dólares que cuesta en algo mejor hecho
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