Estos suenan a Thrash, y lo más importante de todo: son Thrash. De hecho yo los calificaría como Speed/Thrash Metal, etiqueta muy en desuso, y hasta repulsiva para muchos, pero lo que aquí tenemos es la herencia directa de cosas tan elevadas como SLAYER, RAZOR y AGENT STEEL. De hecho en algunos momentos de guitarras dobles me recuerdan al estilo típico de IRON MAIDEN. Puro poder y energía propagan veloces canciones como “Thrash is back” y “Striking death”. Igual el trabajo de guitarras se aprecia un poco más en “Spread the fire” pues hay varios cambios de velocidad en distintos momentos de la canción. Por supuesto que hay influencia europea en la música de estos cuatro thrashers de origen latino. Las partes melódicas de guitarra no contrastan en lo absoluto ni restan poderío en ningún momento, lo cual es un logro en sí mismo, tal y como se oye en “Betrayal”. La producción ayudó mucho para que se tuvieran buen poder en la grabación, sin mencionar que los instrumentos se aprecian claramente. Destrucción total hay con “Massive execution” y “Dreams of terror”. ¡Si hasta parece que este disco se grabo en 1987! Thrash galopante y rocker para mover la cabeza hay en “Metal forever” y la fuerte influencia de ONSLAUGHT in “Command of the beast”, canción que cierra este ataque de Thrash/Speed, apto y recomendado sólo para thrashers de adeveras.
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