Después
de la desintegración final de Ancesthor, José Luis se avocó a seguir adelante
con la música, por lo cual se dedicó a trabajar en algunas ideas y finalmente
plasmarlas. Island of Doom es el
resultado de todas esas ideas atoraras y que tenían que plasmarse. El estilo es
Thrash/Speed Metal, por supuesto con muchos aires de la década clásica de los
80. No es el típico Thrash tocado sin personalidad, pretendiendo sonar muy
“true” entre más fusilero sea. No.
Aquí hay elementos poco hallados en el Thrash Metal actual y que se han
olvidado en el tiempo, como el de las estructuras complejas y pasajes melódicos
que se complementan con la velocidad. Como ejemplo está ahí la variada “Below
the Weeping Sky” o la energética “Island of Doom”. Lo único que creo que está
algo flaco es la producción, que en mi opinión debió sonar con mayor fuerza en
las guitarras, con distorsión destructora. También mejor mezcla les hubiera
dado buenos resultados. Por esos motivos hay momentos que la agresividad no se
distingue a plenitud y nos da la certeza de que el grupo está más inmerso en lo
técnico que en la agresividad, lo cual en sí mismo no es nada malo. Pero más
potencial al sonido nunca cae mal. Aires claros de bandas como Coroner o Watchtower,
así como embarradas de Thrash alemán, es lo que se oyen en todo este disco
lleno de riffs que dan vida al concepto lírico, que en algo me recuerda a los
discos medio conceptuales de Running Wild como The Rivalry. Definitivamente recetado para los que buscan algo de
personalidad en la música de nuevos grupos
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