La única sorpresa que podría haber con un disco de CANDLEMASS es que no fuera Doom. Lo habitual con CANDLEMASS es que hay calidad y no se ve que nadie les pueda hacer sombra como los meros meros del Doom Metal. Para algunos es mejor este que el anterior, para otros es lo contrario exactamente. Creo que este puede ser un poco mejor pues se oye mayor acoplamiento del tejano Robert Lowe, que ha hecho un buen trabajo en cuanto hacer entender a la gente que él es la voz de CANDLEMASS, y ya no Messiah Marcolin. El disco empieza poderoso y avasallador con la básica “If I ever die” y le sigue la asfixiante “Hammer of Doom”. Pesada a más no poder junto con la siniestra “Demon of the Deep”, que tiene su toque 70’s con un órgano tipo Hammond que le añaden ya para el final. Atrae mucho por su coro y su pre coro la exquisita “The Bleeding Baroness”, rola con la que el headbang se hará pausado y lento, a extremos que sólo los adeptos del Doom podrán seguir. Los riffs simples, pero poderosos y pegadores han sido eternamente la marca indeleble de Leif Edling y sus muchachos, eso se nota a lo largo de todo el disco y especialmente en la que empieza el lado dos “House of 1000 voices”. Todo un viaje de epopeya por los espacios etéreos y el mundo subterráneo de sombras largas. Y la voz de Robert sigue luciéndose, tan expresiva como la que Messiah siempre gustaba de usar. El coro de “Dead Angel” se sale un poco de lo habitual de la banda, pero es sólo un detalle que no queda mal, y que se conjuga bien que los riffs mega Doom. Se escucha por todos lados el estilo del grupo, y pese a eso, en ningún momento se siente que el grupo se autofusile. Eso sólo los grandes lo logran. Como ya es la fea costumbre de Nuclear Blast, sacó este en cuatro presentaciones diferentes: el LP limitado y numerado, que trae como extra un 7”EP, la de CD que trae una canción extra menos que el LP, pero que trae un DVD con cosas en vivo. El box set limitado y con una bandera y la edición normal en CD sin el material extra. En el 7” EP que viene en el vinil se incluyen dos canciones extraídas del disco “Lucifer Rising”, que es casi totalmente grabado en vivo. Y previo a todo esto, salió un 7” EP foto disco con las canciones “If I ever die” y “Emperor of the void”, así como otro 7” con los tracks “Hammer of Doom” y “If I ever die”. Si alguien nota en todo esto un intento por hacerse de algo de dinero rápido, será pura coincidencia. Lo triste de todo es que todas las versiones son caras, pero el material vale cada miserable euro que se pague por ellos. Con dos semanas que dejen de chupar les alcanzará perfecto para comprar alguna de las ediciones de este disco de excepción.
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